ADORABLES PESTAÑAS

ADORABLES PESTAÑAS

No es nuevo que los hombres con frecuencia quedamos afectados al ver unas pestañas bonitas. Nos evocan la imagen de Bambi, sus ojos enmarcados por sus enormes y aleteantes pestañas. Y nos asalta la duda de si son o no reales. Hay muchas recursos y productos para destacar este atributo de belleza.

Permanente de pestañas

Es un método para estirar, curvar y hacer más duras las pestañas propias, Puede completarse con un tinte o con unas extensiones, necesitando en este caso menos para un buen resultado.

Hay riesgo de irritar el ojo, por eso debe ser realizado por profesionales bien entrenadas/os. Puede verse el proceso en este link https://youtu.be/ECes13keIUQ

Pestañas postizas

Nacieron en los primeros años de Hollywood, para dar dramatismo y carácter a las miradas femeninas y acabaron saliendo de la pantalla para instalarse entre las mujeres de carne y hueso.

Su gran ventaja es que pueden sacarse por la noche antes de irse a la cama y su pegamento está tan desarrollado que raramente produce alergias o intolerancias.

Extensiones

Concebidas como una evolución de las pestañas postizas, nacieron en Corea en los primeros años del siglo XXI y se han hecho muy populares. Consiste en colocar uno a uno en cada pestaña  pelos humanos o de otro origen (seda, poliéster, visón siberiano). Duran aproximadamente 2-3 semanas, tiempo en ocasiones suficiente para una boda y una luna de miel.

El inconveniente: se pegan con una resina que con alguna frecuencia produce irritaciones.

Implantes de pestañas

Una alternativa cada vez más actual. Comenzaron a realizarse en Asia, dese donde se extendieron en primer lugar a Estados Unidos y después al resto del mundo occidental.

Inicialmente estaban  limitados a pacientes que habían sufrido quemaduras o algunas malformaciones congénitas. Actualmente más del 80 % de estos trasplantes son por razones estéticas.

La técnica es delicada. No podemos anestesiar el párpado, así que lo entumecemos aplicando frío. Después se colocan unas lentillas opacas, con objeto proteger la retina y la córnea y de que el paciente no vea “una aguja acercándose a su ojo”. Los implantes se colocan solamente en el párpado superior, de pelos procedentes de la parte baja de la nuca.

Aunque pueda parecer una técnica “arrolladora” la mayoría de los cirujanos capilares del mundo huye de ella. Para la Sociedad Internacional de Cirugía de Restauración Capilar los riesgos de infección, formación de quistes y cicatrices no justifican el procedimiento más que en los casos severos, como aquellos en los que inicialmente se llevaba a cabo (quemaduras y malformaciones).

Tampoco son despreciables los efectos secundarios habituales: hinchazón, picor y hematomas que frecuentemente apartan al paciente de la vida social durante una temporada. Sin olvidar que el pelo crece al ritmo de su lugar de origen durante bastantes meses, obligando a recortarlas cada 3-4 semanas.